Mostrando entradas con la etiqueta porcino. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta porcino. Mostrar todas las entradas

domingo, 16 de febrero de 2014

VEJIGAS LLENAS


El llamado déficit de tarifa, además de los aumentos de costes al consumo, supone un importante recorte de ingresos para muchos sectores. Es el caso de las plantas de cogeneración para tratamiento de purines en el sector porcino, con pérdidas retributivas en torno al 40%.

En la actualidad hay en España 29 plantas, algunas de las cuales han cesado su actividad y otras lo harán dentro de poco. Por el momento se entiende como una medida de presión ante el gobierno, pero simula de manera bastante precisa lo que pasará si sigue adelante este proyecto tal como se ha planificado. De acuerdo con los datos de la industria, supondrá unas pérdidas de 4.200 empleos.

Desde el punto de vista ganadero, la proporción del sector del porcino amenazado por este planteamiento no es mayoritario, y quizás sea este el único dato que ha considerado el Ministerio de Industria para valorar su impacto. En estas industrias se tratan 2,5 millones de toneladas de purines, frente a los 50 millones de toneladas producidos por toda la ganadería porcina española. Un 5% que, a pesar de no parecer mucho en términos relativos, lo es en valor absoluto, ya que se trata de una pequeña parte de un gran sector, muy importante para nuestra balanza de pagos. El porcino español es el cuarto productor mundial y el segundo europeo, solo superado por Alemania.

Las actuales plantas de cogeneración para el secado de purines se desarrollaron al amparo de una estrategia pública, con el objetivo de eliminar estos residuos en aquellas zonas donde la normativa de nitratos no permitía su uso como fertilizante. Las inversiones que han realizado tanto industriales como ganaderos, se han basado en un escenario a largo plazo que no se puede romper de forma brusca; entre otros motivos, porque en el momento actual no existen alternativas tecnológicas viables y autorizadas.

Hay algunas realidades que son difíciles de cuestionar. Por un lado, el balance energético y económico de estas plantas, es muy negativo. Por ejemplo, si se repercutiera el coste de secado al precio final de la carne, éste se duplicaría. Por otro lado, al retribuir a estas plantas de cogeneración, se produce una discriminación con respecto a plantas similares en otros sectores, no remuneradas.

El problema fundamental no radica en que el sistema deba ser corregido, sino en que se aplique de una forma radical, sin establecer periodos transitorios negociados que permitan adaptarse tanto a la industria como al sector productor. De hecho, la propuesta actual es su entrada en vigor con efecto retroactivo desde julio de 2013.

Ante esto, la única solución con la que debe contar el Ministerio de Industria, profundo conocedor de nuestro agro, es la prohibición a más de un millón de cerdos, de vaciar sus vejigas.

 

 

domingo, 16 de marzo de 2008

IBERICO EN CRISIS


El porcino ibérico también nota la importante crisis de precios que azota a buena parte de las ganaderías. ASAJA ha denunciado esta situación y ha aportado un balance desde septiembre de 2006. Las bajadas oscilan entre el 43 y el 73 por ciento en el caso del lechón. Entre 3 y 9 arrobas, las bajadas han rondado el 50 por ciento y se han situado entre el 27 y el 29 por ciento en pienso. Para bellota la bajada de las cotizaciones ha sido algo menor y ha alcanzado el 15 por ciento. Un descenso derivado del importante incremento de las producciones de ibérico a nivel nacional. En el caso de la bellota y recebo la limitación de dehesas ha impedido un crecimiento exagerado. No obstante, la posibilidad de producir este producto en otras dehesas no tradicionales hace necesario acelerar la puesta en marcha de una identificación geográfica protegida que diferencie más la calidad de estos derivados. Por otro lado es imprescindible la rigurosa aplicación de la Norma de Calidad del Ibérico, que por el momento no ejerce un control eficaz. Todo ello sin olvidar la necesidad de reorganización del sector regional. Dada la presión ejercida por las grandes producciones extraregionales, el sector de pienso tendría que adaptarse y concentrarse para optimizar costes; por ejemplo, poniendo en marcha salas de sacrificio, despiece y envasado. Uno de los talones de Aquiles del conjunto de la ganadería de la región.

sábado, 1 de diciembre de 2007

LIGERO FRENO AL PESIMISMO GANADERO


En lo que respecta a la ganadería, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y el sector agrario han llegado a un compromiso para paliar la crisis actual. Ha actuado con una diligencia que ahora debe quedar plasmada en el cumplimiento de los acuerdos adoptados, a pesar de que importantes diferencias en la valoración de las diferentes organizaciones profesionales agrarias. Se ha establecido un reparto financiado de derechos de prima de ovino y caprino, promoción de producciones de calidad, fomento del ganado autóctono, programas de conservación, selección de razas ganaderas, programas sanitarios y de trazabilidad de la producción. A corto y medio plazo destaca la bonificación de intereses y de avales. Estas últimas medidas deberán ser acordadas con el Ministerio de Economía, ya que no son competencia de la cartera agraria. Destaca la extensión de estos acuerdos al vacuno y porcino. Ha habido discrepancias, pero al final las tres organizaciones profesionales han decidido aplazar la gran manifestación nacional. Decisión sensata.

En el caso del porcino se intuyen cambios de tendencias, aunque ligeros. El Presidente de la Asociación Nacional de Porcinocultura Científica (ANAPORC), José Manuel Sánchez Vizcaíno, ha estimado que para abril de 2008 mejorará el mercado. Una previsión motivada por la caída del precio del pienso y la reducción de la oferta. La oferta se va a ver reducida como consecuencia de la desaparición de parte del sector en Europa y la posibilidad de exportar con restituciones. La bajada del precio de los cereales es una hipótesis que cada vez se extiende más pero que todavía tiene muchos flecos. Depende en gran medida de la continuidad en el tirón del consumo de los países asiáticos, no tanto del incremento de la producción en la Unión Europea. Las importaciones siguen estando limitadas por el ralentí transgénico. La eliminación de aranceles a la importación de cereal va a tener un efecto poco significativo dado el alto precio al que ya entra y la escasez actual en el mercado internacional. Mientras tanto, España sigue teniendo los precios de porcino más bajos de Europa a 0,89 euros el kilo de canal, con una cierta recuperación de las cotizaciones dada la reducción de la oferta, también en el mercado de los lechones. (Publicado todo o parte en Norte de Castilla, Hoy, La Rioja, El Comercio, Diario Montañés, Sur, Ideal, ABC, La Voz)